en el Metro

Un Monumento con Ruedas

Entre las curiosidades francesas en general y parisinas en particular existe esta manía de las celebraciones históricas.

Eso se manifiesta por ejemplo a través de estas placas conmemorativas colgadas en cualquier sitio.

También se expresa a través del Inventario de los Monumentos Históricos y la inscripción de elementos a veces sorprendentes.

Entre estos elementos, el último que descubrí es un viejo metro bautizado Sprague-Thomson.

 

Este tipo de tren fue utilizado en el metro parisino a partir de los años 1930 y empezaron a reformalo en los años 1960.

El 16 de Abril de 1983 es cuando circuló el último tren de este tipo para un servicio normal.

Era un material muy fiable y los maquinistas que conducen estos trenes en algunas ocasiones especiales celebran sus capacidades y, entre otras cosas, la velocidad que pueden alcanzar.

 

¡Tren de otros tiempos, costumbres de otros tiempos!

En aquel entonces existían dos clases de vagones: los de primera clase y los de segunda clase.

Verdes los de segunda, rojos los de primera...
¿Será porque es preciso pacificar a la plebe y espabilar a la gente más selecta ?

No sé si en estos años los colores ya tenían los sentidos que les otorgamos hoy pero si tal es el caso, confieso que aprecié la ironía de la selección.

 

En los vagones de segunda clase, los asientos eran de madera, minimales pero suficientes.

Me dejé llevar por la curiosidad y salí del vagón de segunda clase con la idea de comparar los asientos de madera con los asientos de primera clase.

La verdad es que el uso del rojo permite ubicar enseguida el vagón de primera clase.

Total abandoné la parte popular y fui a visitar el vagón rojo.