Todo empezó
en 1998.
En la Comunidad Brasileña
que reside en Francia surgió la idea de organizar un "lavagem":
trasladando una tradición ancestral, inventarían
un trocito de Brasil en la Capital francesa.
En Salvador de Bahia,
la ceremonia consiste en lavar las escaleras de la Iglesia del
"Senhor do Bonfim" que se ubica en una colina.
Inicialmente, se celebraba así la Epifanía, preparando
el lugar para la llegada de los Reyes Magos. Pero en Brazil las
creencias se superponen y el sincretismo africano transformó
este ritual cristiano en una gran fiesta popular.
Eso querían
organizar los brasileños expatriados.