Mujeres (París - 18°)

Erase una vez una pared triste, larga como un día sin fín.
Eranse una vez unos Educadores que trabajaban en la calle y buscaban un proyecto que movilizara a los jóvenes del barrio.
Erase una vez unos artistas convencidos que el arte puede ser una manera de entablar el diálogo.

Todos estos elementos se juntaron en una calle del distrito 18 y así es como empezó la aventura.
Pocas veces encontrarás entre las pintadas que adornan las paredes, una obra que tenga, como ésta de David Thiolon, semejante calidad de composición...
Quizás unos metros mas lejos, si contemplas "el puerto"...