Erase una vez una
casa abandonada.
Solita, la casa andaba
muy triste.
Eso conmovió
a los artistas del barrio y se juntaron para hacerle un regalo:
inventaron una colección de criaturas y la casa se sintió
vivir de nuevo.
Por cierto, algunas
criaturas parecen un poco preocupadas. Pero será que
allá, muy lejos, hay rumores de guerra...